De la Redacción de Tvsana

La Agencia Sanitaria de los Estados Unidos (FDA) aprobó recientemente un dispositivo que mediante impulsos eléctricos genera sensación de saciedad, para combatir la obesidad.

La obesidad es un tema que cada día preocupa más a la comunidad médica internacional, ya que los índices, a nivel mundial, lejos de bajar, suben y de modo alarmante. Y en la permanente lucha de la ciencia por frenar este flagelo, van lográndose avances. El último data de comienzos de año, ocasión en la cual la Agencia Sanitaria de los Estados Unidos (más conocida como la FDA), aprobó un dispositivo electrónico que se implanta en el abdomen de un grupo de pacientes obesos y sirve para controlar las sensaciones de hambre y saciedad, por lo tanto, colabora con el propósito de bajar de peso.

¿Cómo funciona? El aparato, bautizado con el nombre de “Sistema recargable maestro”, posee unos electrodos que se implantan en el abdomen de las personas y estimulan el nervio vago, el cual le informa al cerebro el estado del estómago, es decir, si está lleno o vacío. “Se trata de un bloqueador que puede ser utilizado recién en personas mayores de 18 años con obesidad severa o muy severa, en la cual ya hayan fracasado otros programas controladores del peso, y que además presente algún otro inconveniente de salud asociado a la obesidad, como la diabetes, la hipertensión o apneas del sueño ”, destacaron en la FDA.

¿Cómo se diagnostica el nivel de obesidad? Se diagnostica a partir del índice de masa corporal, un simple indicador que surge de la relación entre el peso y la altura de cada uno. Y se calcula mediante la división del peso de la persona en kilos por el cuadrado de la talla de la persona en metros. Si el guarismo obtenido es igual o superior a 25, significa que esa mujer o ese hombre, padece sobrepeso. En cambio, si el número es igual o superior a 30, el diagnóstico es obesidad. Por ejemplo: alguien que mide 1, 78 metros y pesa 108 kilos, tiene un índice de masa corporal de 35, es decir, es obeso.

Una vez colocado el aparato, se conectan los dos electrodos del bloqueador en las ramas izquierda y derecha del nervio vago, en la zona de la unión entre el estómago y el esófago.  Y por medio de impulsos eléctricos, el bloqueador interrumpe la comunicación entre el cerebro y el estómago, generando una sensación de saciedad y disminuyendo las ganas de ingerir alimentos. El bloqueador consta de una batería que se recarga de manera inalámbrica y cuya vida útil alcanza los 8 años. Además, viene provisto de un control remoto para programar las funciones del bloqueador.