De la redacción de tvsana

Es una capa de suciedad que se forma sobre la lengua debido a una mala higiene. Este problema tiene múltiples causas y la mejor manera de prevenirla es realizando una adecuada limpieza bucal.

La saburra lingual no es otra cosa que una cubierta blanquecina de suciedad, depositada sobre la lengua. ¿La razón? Falta de higiene o una incorrecta limpieza. Esa capa de suciedad está compuesta por células viejas, restos de comida y bacterias que forman la costra rugosa, la cual es acompañada de un mal sabor de boca y halitosis, que es un signo clínico que se caracteriza por el feo aliento o desagradable olor bucal.

Normalmente, la saburra aparece cuando la lengua no recibe una adecuada higiene; pero también puede surgir como síntoma de alguna enfermedad, por ejemplo, una inflamación, una infección o una intoxicación. Además  se encuentran otras causas provocadoras de este problema: una mala alimentación, comer rápidamente o fuera de horas, no masticar con corrección o ingerir alimentos con abundantes grasas saturadas. También es propiciada por la existencia de hongos en la boca, por una infección a causa de fiebre, por enfermedades del estómago (por ejemplo, una gastritis) o enfermedades de transmisión sexual (como la sífilis), por el consumo de medicamentos y sustancias tóxicas (el plomo, el bismuto), debido a enfermedades de la piel y mucosa (pénfigo -una enfermedad autoinmune en la que los anticuerpos atacan a células sanas en la piel y boca, causando ampollas y llagas- o liquen plano -enfermedad inflamatoria poco habitual, que también afecta la piel y la mucosa oral-), las aftas orales y el cáncer de lengua.

La mejor y más efectiva manera de prevenir la saburra es manteniendo una higiene oral adecuada. Por lo tanto, es necesario e imprescindible eliminar las células viejas, los restos de comida y los gérmenes, siguiendo estos consejos vertidos por médicos especialistas: cepillando la lengua después del aseo de los dientes, dos veces al día y sin presionar mucho, pero asegurando que se libere la mayor cantidad posible de residuos atorados en la lengua, tanto adelante, como en la parte posterior. Otra sugerencia a destacar es el empleo de un enjuague bucal a base a alcohol, que ayudará a matar las bacterias que se acumulan entre los pliegues de la lengua. Dejar de fumar es determinante, ya que inflama las papilas gustativas y deshidrata la boca. Y, como último consejo, se recomienda comer alimentos como el yogur sin azúcar, que ayuda a restaurar el equilibrio de las bacterias en la boca e ingerir verduras y vegetales crudos.