Asesoró la médica clínica Lorena Cirigliano (MN 133.404)

La artritis reumatoidea es una enfermedad autoinmune que afecta las articulaciones pero además puede comprometer otros órganos del cuerpo humano como el corazón, los pulmones y los ojos.

Generalmente comienza afectando las pequeñas articulaciones de los dedos de la mano, muñeca y pies tanto del lado derecho como del izquierdo.

El médico examina e interroga al paciente sobre sus dolores, sobre que articulaciones se inflaman, se ponen caliente y cambian a un color rojo.

Otro punto a evaluar es la duración de los síntomas, la misma debe ser superior a las 6 semanas.

El conjunto de todos estos datos  permitirá la sospecha diagnóstica  o no de esta enfermedad.

Luego se avanza con estudios complementarios como un análisis de sangre donde se solicitan varios ítems, incluidos  el factor reumatoideo y anticuerpos específicos, y  se solicitan imágenes, radiografías de manos, muñecas y pies y/o ecografías doppler de algunas articulaciones para evaluar el daño articular.

Entonces si cumple los criterios diagnósticos, y  habiendo descartado otras patologías, se llega a la conclusión que el paciente presenta artritis reumatoidea y se comienza con el tratamiento lo antes posible para evitar un daño articular permanente.

Como siempre advertimos sobre la importancia de una consulta oportuna al clínico y al reumatólogo  para un diagnostico precoz y un tratamiento adecuado.

No deje de consultar con su médico, ya que este artículo es de carácter informativo,  no reemplaza la consulta médica.