
Este virus, el cual nos está generando algunas enseñanzas, por suerte no se ha ensañado con las embarazadas, niños y jóvenes.
Lamentablemente han fallecido 25 menores de 19 años, pero todos con enfermedades preexistentes muy graves. De los 20 a 50 años los fallecidos son 591, mientras que los mayores de 50 son 6.945. Cabe destacar que las enfermedades preexistentes donde el virus causa más daño son: hipertensión, enfermedad neurológica crónica, diabetes, insuficiencia cardíaca, enfermedad oncológica previa y obesidad. En el GCBA la mitad de los fallecidos tienen más de 80 años, mientras que a nivel país representan el 36%. Solo el 5 % de los fallecidos no poseían comorbilidades.
En un día ya se superaron las 10.000 personas contagiadas y el crecimiento en varias provincias es muy alto. Capital Federal parece tener una tendencia estable y a la baja, pero todo es muy dinámico y no se puede asegurar nada. Mientras que el incremento de fallecidos en la Provincia de Buenos Aires es preocupante, lo mismo que la saturación del sistema de salud en provincias como Jujuy o La Rioja. Salvo en sitios puntuales, el sistema de salud está respondiendo ante casos de internación y terapia intensiva.
El dato a favor es que el promedio de contagiados tiene 38 años y son los que no suelen tener complicaciones. La letalidad es baja (2%) con respecto a otros países, lo mismo que la cantidad de muertos por millón. Para citar algunos ejemplos, Italia, España, Estados Unidos, Brasil, Perú, Chile tienen una cantidad muy superior a la nuestra en cuanto a contagiados y fallecidos.
La cuarentena sirvió y mucho para estar en ésta situación, donde el objetivo era que no sobrepasase el sistema de salud y por ahora se viene cumpliendo.
Ahora la situación es preocupante respecto a la tasa de hisopados positivos. La misma es cercana al 50% (dos de cada uno que se hisopan dan positivo), lo cual es un dato alarmante ya que el virus está circulando y mucho. Si no logramos detenerlo, evitando los encuentros sociales y familiares la situación se puede descontrolar.
Sé que muchos están cansados. El único consejo que me permito dar es que en caso de no tener opción de estar en contacto con personas, ya sean compañeros de trabajo, familiares o amigos no convivientes, que sea al aire libre, a dos metros de distancia y con tapabocas. Las reuniones con no convivientes asociadas a la comida son muy habituales. En esos casos también debemos respetar la distancia, ventilar el ambiente, cuando no estoy comiendo usar tapabocas, no saludarnos y lavarnos las manos.
Toda persona que presenta un síntoma debe aislarse y llamar al sistema de salud.
Todo depende de con qué cristal miremos esta pandemia. Estamos en una situación complicada pero depende de nosotros poder bajar la contagiosidad de este virus.
Dr. Diego Montes de Oca
Médico Pediatra MN: 84.881
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