Aunque tengamos una buena salud mental el hecho de rodearnos de personas conflictivas en algún aspecto puede llegar a afectarnos negativamente y arrebatarnos la confianza que tenemos en nosotros mismos
A lo largo de nuestra vida tenemos la oportunidad de conocer personas de todo tipo, con distintas personalidades y formas de vida.
Algunas se convierten en nuestro apoyo y, de hecho, se vuelven claves en nuestro proceso de crecimiento personal y profesional.
Otros, por su parte, no hacen más que contaminarnos con su negatividad y, aunque no siempre lo notamos, se vuelven un gran obstáculo para trascender como queremos.
Lo peor de todo es que suelen ser personas acostumbradas a manipular y, tras caer en sus juegos, acabamos en situaciones indeseables que no queremos afrontar.
Por esta razón es muy importante aprender a identificarlas y, sobre todo, mantenerlas lejos cuando, efectivamente, pretenden interferir en nuestras vidas.
Descubre las 9 principales.
1. El inconforme contigo
Una persona que pretende cambiarte, o que todo el tiempo te señala tus defectos, poco puede aportarte si lo que deseas es estar bien.
Estas amistades pretenden que te amoldes a lo que ellos consideran que está bien y, aunque al principio parecen querer ayudarte, en realidad esperan que dejes a un lado tus intereses
2. El escandaloso
La típica persona con personalidad irreverente e impulsiva se puede convertir en una molesta compañía, sobre todo cuando acostumbra a hacer de cada situación un escándalo.
Salir con alguien así no solo resulta incómodo, sino que te puede provocar problemas con otros, incluso sin tener nada que ver con su problema.
3. El envidioso
El envidioso es un verdadero ladrón de energía y, por desgracia, casi siempre está en tu círculo de amigos y personas cercanas.
Este tipo de personas critican constantemente, permanecen negativas y, ante tus logros, sentirán enojo e infelicidad.
No soportan que tengas éxito y, de algún modo, buscarán la forma de que seas inferior a ellos.
4. El pesimista
Si te rodeas con una persona pesimista es inevitable que, en algún momento, empieces a sentir inseguridad al tomar tus decisiones.
Esta gente destruye tus sueños, consciente o inconscientemente, dado que su forma de ver la vida siempre encontrará uno y mil motivos para no intentarlo.
En lugar de encontrar posibles soluciones, te muestran con grandeza los obstáculos y te hacen pensar que no puedes hacerlo, solo porque ellos no pueden.
5. El arrogante
Las personas arrogantes disfrutan con acosar e intimidar a otros. Tienen tanta confianza en sí mismos que piensan que son mejores que cualquier persona que esté a su alrededor.
Cuando compartes con alguien así te expones a sufrir humillaciones y momentos desagradables.
Además, en el entorno profesional dificultan tu trabajo y hacen del ambiente algo tenso e incómodo.
6. El que se hace la víctima
¡Mucho cuidado! Aquellos que están acostumbrados a victimizarse son quizá las personas más tóxicas que te pueden rodear.
Todo el tiempo están poniendo excusas y no suelen asumir las responsabilidades que les corresponden.
Sufren todo el tiempo y culpan a otros de sus errores y de las cosas malas que les pasan.
Por más que les aconsejes no están dispuestos a cambiar y mantienen un complejo de inferioridad.
7. El rencoroso
Cuando alguien es rencoroso no consigue amar ni establecer lazos fuertes ni saludables. Su incapacidad de perdón le acumula enojo y aumenta sus comportamientos egoístas.
Si tienes alguien con esta característica a tu lado, tarde o temprano atravesarás una situación en la que te reprochará algún defecto u error.
Es muy difícil mantener estas relaciones, puesto que se roban la armonía y la confianza.
8. El dependiente
Una persona dependiente no soporta que sus amigos, pareja, e incluso familiares realicen actividades en las que no estén incluidos.
Son incapaces de tomar decisiones propias y les enoja que tú si puedas dar pasos sin ellos.
A menudo, sienten celos enfermizos, piden explicación por todo y adquieren comportamientos obsesivos.
No respetan tus espacios personales y pretenden solucionar los problemas con berrinches.
9. El chismoso
¿Qué te hace pensar que una persona chismosa no te hará daño? Estas son incapaces de separar el hecho verdadero con el rumor y, muchas veces, agregan más mentiras a la historia con el único fin de dañar a otros.
La gente chismosa es insegura y se alegra cuando alguien no lo está pasando bien.
Tener una compañía chismosa, como amigo, o en el ámbito laboral, es potencialmente destructivo.
A menudo, quienes disfrutan de chisme, son personas envidiosas e infelices. ¡Aléjalas!
¿Quieres tener tu salud mental en equilibrio? Analiza quiénes son los que te rodean y aleja a aquellos que no te aportan nada bueno.
Si bien puedes pensar que tienes todas las herramientas para defenderte, en algún momento puedes atravesar un mal momento por mantener estas relaciones.
Fuente: Mejor con salud
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