De la Redacción de Tvsana

El balanceado consumo de alimentos identificados con colores, permite asegurar una buena salud.

Por diferentes razones, mucha gente cree que ciertos alimentos son dañinos para su salud, sin embargo, un estudio reciente indica que no lo son tanto, y al contrario de la creencia general, estos son más nutritivos de lo pensado y la clave para que no causen inconvenientes es, precisamente, la moderación en su consumo.

En este sentido, y de acuerdo con el “National Hearth, Lung and Blood Institute”, de la ciudad de Bethesda, en Maryland, Estados Unidos, el secreto para elegir alimentos saludables y que no provoquen daño alguno en el organismo, es decir, aquellos que no deben faltar bajo ningún concepto, siempre y cuando sean ingeridos en proporciones adecuadas,  deben incluir tres colores: verde, amarillo y colorado. Y así, una persona, no sólo estará mejor alimentada, sino que gozará de buena salud, un mejor estado de ánimo y se mantendrá en forma.

Verdes, amarillos y colorados

Los alimentos de color verde son los aconsejados para comer en cualquier momento, ya que debido a su composición, estos son bajos en grasa y contienen pocas calorías y azúcares. Representan una rica fuente de vitaminas, minerales y otros importantes nutrientes vitales para la buena salud. ¿Ejemplos? Las frutas, las verduras, los granos integrales, los productos lácteos con bajo contenido graso, las carnes magras, la carne de ave, pescado, los frijoles y las claras de huevo.

Los considerados alimentos amarillos, son muy nutritivos, no obstante, los médicos recomiendan no consumirlos frecuentemente, debido a que contienen mayor proporción de grasas y azúcares que los llamados “verdes”. En esta categoría de alimentos amarillos, figuran las verduras con grasas agregadas, el pan blanco, la mayonesa baja en grasas y la leche con un contenido graso de hasta el 2 %.

El restante grupo de alimentos es el identificado con el color colorado. Estos se ingieren de vez en cuando o solamente en ocasiones especiales. Son altos en contenido graso y azúcares agregados, además de incluir un escaso contenido de vitaminas, minerales y otros importantes nutrientes. En esta lista se incluyen, entre otros: la leche entera, el queso, las papas fritas, las tortillas, el pan dulce, la manteca y los aderezos cremosos para ensaladas. Respecto de estos alimentos, el consejo médico es claro: consumirlos con poca frecuencia y de modo reducido.

La cuestión no es privarse de nada, sino, consumir moderadamente y cada tanto, esos alimentos tan tentadores como dañinos para la salud, las comidas rápidas, por ejemplo, que representan uno de los principales motivos por los cuales muchas personas (chicos y grandes) padecen sobrepeso y obesidad.

Fuente: National Hearth, Lung and Blood Institute